Fernando Lázaro

Natural de A Coruña donde comienza sus estudios de danza clásica con Mercedes Suárez.
Titulado en Enseñanzas Profesionales en Danza Clásica y especializado en técnicas de moderno/jazz/contemporáneo.
Titulado en Coaching e Inteligencia Emocional por la UFEL de Madrid.

“Para nosotros la danza va más allá que un trabajo. Es una manera de comunicarte con tu propio cuerpo y comunicarse con los demás. Bailar es el arte más primario que existe junto con la música. Antes que la palabra, surgió la danza de nuestros cuerpos. Hay muchos aspectos de la personalidad que solo se pueden transmitir cuando bailas: cuando lo haces a solas en tu habitación, en una fiesta con amigos, en una clase y por supuesto, sobre un escenario.

Por esta razón enseñar danza va más allá de la técnica, es otro canal para la expresión, una vía de escape diferente por la que se transmiten desde estados de ánimo a historias construidas por coreógrafos. Todo el mundo en los musicales puede bailar. De alguna manera hasta el decorado baila, todo se acompaña de coreografías para que el público disfrute de una experiencia visual inolvidable.

Sobre el escenario de los musicales los intérpretes deben moverse con gracia, con estilo. Al margen de hacer coreografías más o menos complejas los actores tienen que entender el trabajo de la danza y participar tanto del movimiento escénico como de repertorios más complejos. Idealmente todos los artistas de musicales han de bailar en su mayor o menor medida no solo por las necesidades de las obras sino para entender la esencia de este género.

Cada artista debe desarrollar su talento dentro de esta disciplina. Sin ir más lejos el Tap es un estilo que todos los actores pueden aprender independientemente del físico que tengan. El Ballet nos ayuda a tener mayor sentido de la estética, sensibilidad, elegancia y presencia escénica.

El Jazz nos da infinitas formas de expresarnos.

No hemos de olvidar que en los musicales la coreografía forma parte de la historia que estamos contando: se baila desde un personaje, se baila interpretando cada paso, cada gesto, cada palabra, cada nota musical.

Nuestra misión es encargarnos de que los futuros artistas encuentren su danza y encaminarles a lo más alto que puedan, que sean capaces de expresarse mediante este arte.”

Tiene una amplia experiencia como bailarín en teatro, óperas y musicales. También ha trabajado en cine y publicidad.
Como coreógrafo cabe destacar el ballet de «Pulcinella» para el Teatro Real Junior que dirige y coreografía en el 2018. También ha trabajado para el Conservatorio Profesional de Danza Fortea, el Teatro Treviso de Venecia (Italia), los Teatros del Canal y la Fundación Jacinto Guerrero, entre otros. Además, hace trabajos como coreógrafo de TV y en otros eventos.
Pero su mayor trayectoria la desarrolla en el campo de la enseñanza. Desde 2001 imparte clases en importantes escuelas de Madrid hasta que termina trabajando para Carmen Roche, quien le da la oportunidad de ser Jefe de Estudios de Scaena durante varios años. A partir de ahí desarrolla una gran capacidad para crear equipos y programas de formación profesional, ha sido el coordinador de Danza Moderna en Madrid Dance Center y tiene una gran repercusión en cursos nacionales e internacionales de danza: Portugal, Chile, México, Rusia y especialmente en Italia de donde le llaman innumerables veces para impartir clases. Entrena a profesionales, es miembro del jurado en numerosos concursos dentro y fuera del país, y los últimos años es invitado como profesor Especialista en el Conservatorio Superior María de Ávila de Madrid donde enseña técnicas, metodología y repertorio de la Danza Moderna y Contemporánea.
Es co-fundador de Danza180º donde actualmente continúa desarrollando su labor docente y de dirección.